clasificaciones de los generadores

Los generadores eléctricos cumplen la función de mantener una diferencia de potencial eléctrico entre dos de los puntos. A cada uno de los puntos se los denomina polos o bien terminales. Cabe mencionar que en electrónica (o electrotecnia, más específicamente) se denomina polaridad a la cualidad que posibilita realizar una distinción entre cada uno de los puntos terminales de una pila, batería o cualquier otra máquina que funcione de manera eléctrica con una corriente continua.

Dichos polos, a su vez, pueden ser calificados como positivos o bien como negativos. Si nos remontamos atrás en el tiempo, es importante hacer alusión a que antes de que se descubriera lo contrario, la corriente eléctrica era considerada como un flujo de portadores de carga eléctrica y de que los metales se constituían en electrones con la disponibilidad de transportar o circular desde una terminación negativa hasta una de índole positiva. Posteriormente, la corriente eléctrica fue definida como un flujo también, pero de cargas positivas y de esta forma se adquirió un significado más tradicional la circulación de la corriente, ya relacionada con un flujo de cargas que van desde un polo positivo hasta un polo negativo. Volviendo al tema que nos ocupa, los generadores eléctricos son, en esencia, dispositivos que además se ocupan de transformar toda aquella energía que es mecánica en energía eléctrica. Este proceso de transformación se logra gracias a que un campo magnético realiza una determinada acción sobre los conductores eléctricos, que se encuentran dispuestos sobre una especie de armadura, a la que se conoce con el nombre de estator. Por otro lado, es importante destacar que si se produce de manera mecánica un movimiento de gran relatividad entre los conductores y el campo mismo, entonces ahí se genera la llamada fuerza electromotriz.